Esta es la primera lata que hago de este tamaño, ya que todas las que he hecho eran mayores, excepto una que era más pequeña aún. Es un tamaño cómodo de trabajar y útil para guardar cosillas, que además no ocupa tanto lugar, así que a ver si consigo más latas que reciclar, que ya les he echado el ojo a las de Nesquick. Ésta es el tamaño pequeño de las antiguas latas de leche Nutribén.
La lata acompañaba a la tarjeta anterior que envié a Paula. Tenía tantas ganas de estrenar este troquelito de ventana que me había comprado, que decidí ponerle hasta una puerta a la lata, aunque parece más el Partenón de Atenas.
La vallita, la casetita y los pajaritos son troqueles que me prestó Mía cuando estuvo de visita por aquí, y que yo aproveché para hacerme con recortes en todos los colores que encontré (gracias, Mía, ¡cómo me gustan!)
También coloqué por primera vez una cinta tipo corsé en una lata, que
aunque ya había utilizado en alguna caja, nunca la había puesto en lata y
aunque sufrí para meter la cinta, me gustó mucho el resultado.
Le añadí un recorte de césped en fieltro que la misma Paula me había enviado anteriormente. Definitivamente, me tengo que comprar ese troquel.